Ayer, en el recinto de la Feria de Abril de Palma, tuvo lugar la tradicional misa rociera, celebrada por el padre Julio y a la que aportaron sus voces el recién creado Coro Rociero de la Casa de Andalucía.
Bajo un sol de justicia, las cerca de mil quinientas personas "tal vez dos mil" que se dieron cita en el albero, algunas con traje y corbata, pocas de corto "ellos" y menos de faralaes "ellas", aguantaron estoicamente la alta temperatura, algunos echando mano de abanicos, sombreros y hasta pañuelos con los que se cubrían la cabeza. En primera fila, el presidente de la Casa de Andalucía y los políticos Fageda, Juan Bauçà, Catalina Cirer, Toni Roig y Ramon Torres. Y por detrás de ellos, el patrocinador del evento, Fausto Ferrero.
Durante la misa se recordó a los feriantes fallecidos y se pidió por la paz en Euskadi. Comulgó la derecha, o sea, Fageda y Bauçà, mientras que los de izquierda, Torres y Roig, se sentaban y aguardaban respetuosamente. En el momento de «daros la paz», derecha e izquierda se dieron la mano y algunos hasta una palmadita.
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