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El Parlament reconoció ayer de manera oficial que Balears ha padecido una balanza fiscal negativa ante la falta de inversiones del Estado en las Islas. De una manera u otra todos los grupos parlamentarios asumieron que Balears ha aportado al Estado mucho más de lo que las Islas han recibido recibido en inversiones estatales. La comisión no permanente de estudio de la balanza fiscal de Balears aprobó ayer las diferentes propuestas de los grupos parlamentarios, que han analizado durante meses las cifras que aportadas por expertos en la materia.

El diputado de UM Miquel Nadal cifró entre 200.000 y 400.000 millones anuales el déficit fiscal que acumula cada año Balears. «Podíamos decir que el Estado adeuda a las Islas entre 1'5 y 2 billones de pesetas», cuestionó Nadal. UM propone que el Parlament reclame al Gobierno central que nivele la balanza fiscal entre el Estado y Balears y «superar así el déficit histórico existente como consecuencia de una financiación injusta».

En la misma línea se pronunció Antoni Alorda, del PSM, quien reclamó la independencia fiscal para Balears con la aportación a las arcas del Estado de una cuota de solidaridad. Alorda calcula que el déficit fiscal de Balears alcanza el medio billón de pesetas anuales. Entre algunas de sus propuestas, el PSM cree que el Parlament debe constatar una financiación insuficiente estatal en materia sanitaria, educativa, medioambiental, de prestaciones sociales y de infraestructura de transportes en Balears.

Los socialistas también han asumido que Balears padece una balanza fiscal negativa, aunque para el PSOE uno de los problemas es que el Estado no da la correspondiente información desde el año 1997, es decir, desde que el PP gobierna. Los socialistas plantean la necesidad de mantener el principio de solidaridad y reclaman al Gobierno central que desarrolle el Régimen Especial de Balears.