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Toda persona que se ha presentado a las últimas oposiciones para ser funcionario de la Comunitat "y que están todavía en marcha" ha tenido que demostrar conocimientos de catalán. En función de la categoría (puesto de trabajo) al que se opta, el nivel es diferente pero desde un chófer a un abogado deben saber catalán para poder ya no sólo ser funcionario sino optar a ser funcionario. El Govern del Pacte de Progrés, además, ha incrementado el nivel exigido y, por ejemplo, para acceder a un puesto de administrativo ahora se pide el nivel B (conocimiento medio escrito y oral) en lugar del A (conocimiento oral).

Justo antes de las pruebas selectivas hubo un examen de catalán al que se tuvieron que presentar todas aquellas personas que no tenían el certificado correspondiente del nivel de catalán exigido. Además, con la finalidad de facilitar la obtención del certificado pertinente a todas aquellas personas que se querían presentar a las oposiciones, la Junta Avaluadora de Català realizó dos convocatorias extraordinarias (marzo y abril-mayo). Además, l'Institut Balear d'Administració Pública organizó 25 cursos intensivos de catalán para facilitar que su personal pudiese obtener el nivel exigido.

Tal y como puede verse en el gráfico adjunto, de las 8.821 personas que se presentaron para ser funcionario de la CAIB, un total de 2.357 fueron convocados a realizar la prueba de catalán ya que no habían acreditado su conocimiento. De ellos, se presentaron 1.059 es decir, ni la mitad de ellos, siendo el número de aprobados 680. Un 35'78% (379) de los presentados a la prueba de catalán no la superó por lo que no pudieron presentarse a las oposiciones.

Respecto a los 1.298 aspirantes que no se presentaron al examen de catalán hay que señalar que en la práctica totalidad de los casos son abandonos, si bien hay quienes ya pudieran haber obtenido el certificado exigido por otra vía y lo presentan directamente el día de la oposición. El grupo profesional más bajo, el E y que engloba conductores y ordenanzas básicamente, ha tenido que acreditar el nivel A. La cuestión planteada es si el conocimiento del catalán debe ser condición «sine qua non» para trabajar en la administración sea cual sea el puesto.