El Institut Balear de la Naturalesa (Ibanat) tendrá que aumentar su
plantilla hasta el 50 por ciento para poder atender la retirada de
árboles caídos por el pasado temporal. El director general de
Biodiversitat, Josep Manel Gómez, declaró ayer que «los 110
operarios que integran las brigadas del Ibanat no serán suficientes
para realizar este trabajo y habrá que contratar ocho brigadas más
de seis personas cada una, un total de 48 incorporaciones».
Estas contrataciones temporales se realizarán a través del
bolsín de interinos o del Inem, pero al mismo tiempo habrá que
realizar una contratación específica de personas y maquinaria
especializadas. Gómez indica que «la tarea de retirada de árboles
será dura e intensa, pero sólo es temporal, por lo que no se
justifica la compra de maquinaria, sin bien se podría aprovechar
para hacer alguna adquisición si es amortizada en el futuro».
Precisamente, ayer por la mañana, se celebró en la Conselleria
de Medi Ambient una reunión entre responsables de ese departamento,
Consell de Mallorca, Tirme y empresas aserradoras para dar salida a
todo el material forestal resultante de la retirada de árboles y
ramas. La consellera Margalida Rosselló afirmó que «las empresas
del sector están dispuestas a asumir una buena parte de la madera
resultante. Quitando la corteza, los troncos se pueden almacenar
dos o tres años para que tengan salida al mercado, una opción
válida para dar salida a la madera».
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