El conseller puso como ejemplo el hecho que el 50 por ciento del
presupuesto de inversión europea se destine a la partida de
política agraria común (PAC), materia en la que Balears tinen
competencia, «mientras que son los jefes de gobierno de los estados
los que deciden sobre ella, sin contar con los ciudadanos de cada
región, representados por sus respectivos gobiernos». Sucede lo
mismo, añadió Sampol, con los recursos destinados a medio ambiente,
que se canalizan todos a través del Madrid, o con la políticas para
el equilibrio regional, que se vehiculan a través de los fondos
estructurales. «El Gobierno de Madrid, por ejemplo, se ha reservado
hasta el año 2006 los recursos para la política de Investigación y
Desarrollo y no nos deja decir nada», dijo.
Sampol exigió ayer, ante la Conferencia de la Unión de
Federalistas Europeos, la participación de las «regiones
constitucionales europeas» -aquellas que cuentan con un gobierno
propio y un parlamento con capacidad de promulgar leyes de igual
rango que las de los estados, caso de Balears-, que sean
consultadas por el Consejo Europeo en la toma de decisiones sobre
las materias en las que tienen exclusividad competencial. Sampol
abogó por ampliar el principio de subsidiaridad hasta los gobiernos
regionales y que éstos puedan interponer recursos ante el tribunal
de justicia europeo.
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