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Si una mañana cualquiera, mientras depositamos nuestra bolsa de basura en el contenedor que hay al lado de casa, notamos cómo alguien nos observa con el mismo gesto serio que tiene el detective privado Marlowe en sus casos más difíciles y vemos que empieza a hacer varias anotaciones en una carpeta negra, sabremos que hemos incumplido la normativa municipal que establece que sólo podemos depositar las bolsas de basura en los contenedores entre las 20.00 y las 23.00 horas. A partir de ahora, los ciudadanos tendremos que intentar respetar un poco más la ordenanza municipal de limpieza. En caso contrario, un controlador municipal nos informará de nuestra infracción y llamará a un integrante de la Patrulla Verda para que nos ponga una multa.

Desde ayer, los doce controladores habilitados por el Ajuntament de Palma para llevar a cabo esta función iniciaron en el barrio de Santa Catalina la actividad de informar y, en su caso, denunciar a aquellos ciudadanos que incumplan la Ordenanza Municipal de Limpieza, Desechos y Residuos Sólidos Urbanos. Estos controladores, que serán apoyados y auxiliados por la Patrulla Verde, llevarán consigo un documento acreditativo de su función, folletos informativos sobre el cumplimiento de la ordenanza municipal, cámara de fotos para registrar la infracción y bloc de denuncias donde se anotará el motivo de la infracción.

Los inspectores también informarán a los dueños de los establecimientos, bares, restaurantes y cafeterías de la obligación de disponer de uno o varios contenedores dentro del local. Se ha establecido un plazo de dos semanas para que todos aquellos establecimientos que no dispongan de contenedores puedan adquirirlos, bien en el mercado o bien en la propia EMAYA, que los venderá a precio de mercado. Esteban Ruiz es uno de las doce personas mediadoras medioambientales encargados de conseguir que tengamos una ciudad más limpia. Ayer recorría diversas calles de la barriada de Santa Catalina. «La verdad es que la gente suele ser bastante educada cuando se le hace entender que ha cometido una infracción», dijo, y señaló que las infracciones más habituales que él detectó fueron sacar la bolsa de basura fuera del horario establecido y sacar cajas de cartón y dejarlas al lado de los contenedores.

Ruiz indicó que algunos ciudadanos que sacan a pasear a su perro llevan bolsitas o un trozo de papel consigo, «pero si piensan que no son observados no recogen los excrementos del animal», destacó. La teniente de alcalde de Sanitat del Ajuntament de Palma y presidenta de EMAYA, Maria Crespo, señaló que a lo largo de la jornada de ayer tuvieron lugar 230 actuaciones. En un 55% de los casos, se trató de ciudadanos que iban a depositar las bolsas de basura a los contenedores fuera del horario previsto. Un 15% de actuaciones se debieron a que algunos pequeños comercios sacaban cartones a la calle sin depositarlos en el contenedor azul. En un 10% de los casos, fueron algunos bares los que tiraron la basura fuera también del horario previsto. Otro 10% de infracciones fue cometido por aquellos comercios especializados que asimismo tiraban la basura por la mañana o por la tarde. Un 5% de las infracciones fue debido al abandono de excrementos de perros y el 5% restante por poner restos de obras en el contenedor.