El PSIB-PSOE y Esquerra Unida (EU-IU) presentaron ayer ante el
Tribunal Supremo una querella criminal contra el ministro de Medio
Ambiente, Jaume Matas, en la que le acusan de delito electoral,
falsedad documental, malversación de caudales públicos y asociación
ilícita durante su presidencia del Govern. Santiago Ferrer,
diputado socialista balear, entregó la querella en nombre de dos de
los partidos que forman el ahora gobernante Pacte de Progrés
(PSIB-PSOE y Esquerra Unida) por el «caso Formentera», una presunta
manipulación electoral en las elecciones de 1999 para conseguir un
diputado más por Formentera.
Tras presentar la querella, también dirigida contra otros ex
cargos, como la entonces consellera de Presidència Rosa Estaràs, el
diputado Ferrer dijo tener «serios indicios» de que se produjo
«casi el peor delito contra la democracia, que es el manipular
votos e intentar adulterar su esencia». «Estamos aquí para que se
depuren las responsabilidades penales, pues el PP se ha negado en
todo momento a querer asumir cualquier tipo de responsabilidad
política», dijo el diputado.
Matas, por su parte, auguró desde Madrid que «la verdad se
volverá contra el PSOE y demostrará que lo único que han hecho ha
sido calumniar», después de que ese partido presentara la querella
ante el Tribunal Supremo por el «caso Formentera», una acción que
calificó como «instrumentación de la Justicia». Aseguró que el PSOE
«ha hecho una instrumentación de la Justicia con el único ánimo de
intentar desprestigiar al PP de Balears y a mi persona». El
ministro recordó que la acusación sobre la supuesta afiliación
irregular de emigrantes en las elecciones autonómicas en 1999 para
conseguir un diputado más en Formentera «está siendo fruto de una
investigación judicial y, por lo tanto, debería respetarse esa
investigación, si es que se tiene el más mínimo interés en conocer
la verdad».
Añadió que respetará la acción judicial «y después,
naturalmente, actuaremos en consecuencia». Para Matas, la querella
del Pacte de Progrés es una «respuesta desesperada a la realidad
del fracaso de su gestión» y un intento de «desprestigiar al
adversario». Asimismo, el portavoz del PP, Rafael Hernando, indicó
que la querella presentada contra Matas supone un acto de «miseria
política», llevado a cabo por la dirección de un Gobierno «incapaz»
de gobernar en Balears. Hernando, quien defendió la honradez de
Jaume Matas y de la ex consellera de Presidència Rosa Estaràs,
contra la que también va dirigida esta querella criminal, señaló
que el Govern de Antich se ha convertido en una «rémora» para el
desarrollo de las islas y «cada día que pasa cae más en el ridículo
del desgobierno».
Finalmente, el portavoz y secretario general del PSM Entesa
Nacionalista de Balears, Antoni Alorda, mostró ayer su
convencimiento de que Matas «fue el artífice de la trama» por la
que supuestamente se captaron 74 votos de emigrantes argentinos y
uruguayos en los comicios autonómicos de 1999. Así, reiteró que se
sumarán como acusación popular a la querella presentada ayer contra
Matas por PSOE e IU ante el Tribunal Supremo. Alorda explicó que su
partido siempre ha considerado necesario elevar este tema a Madrid
«para que tuvieran posibilidad de defensa tanto Rosa Estaràs como
Jaume Matas». «Estamos convencidos de que éste es un tema gravísimo
en una democracia y por tanto es una situación que no puede quedar
impune», añadió.
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