La dirección de Son Llàtzer admite que trabaja «a destajo» para
abrir el sábado sus puertas, como ya ha anunciado ministra,
gerente, director territorial del Insalud y otros altos cargos,
pero sólo 66 camas estarán disponibles desde la ceremonia
inaugural, mientras que los accesos aún no se han finalizado.
Mientras, entre hoy y mañana, el hospital espera acusar recibo de
obras.
El Insalud acusa al Govern de no acabar el desdoblamiento Son
Ferriol-Palma, mientras que el Ejecutivo Balear afirma que este
acceso estará finalizado antes del fin de semana y recuerda que ha
facilitado al máximo la apertura del hospital.
Para la administración de Son Llàtzer el tramo entre la rotonda
y el hospital es el que queda por acabar. Por otra parte, la
Direcció General d'Obres Públiques niega tener toda la
responsabilidad en este segmento, que corresponde al Ajuntament de
Palma. Son Llàtzer calcula en 3.000 vehículos diarios los que
tendrán que recorrer este tramo, entre trabajadores, pacientes,
consultas externas, proveidores y otros a finales del año 2002.
Desde la Conselleria d'Obres Públiques, el técnico Joan Cifre
afirma que las obras de la rotonda y la carretera «se están
acabando y estarán finalizadas antes del fin de semana». Para la
Conselleria, «nadie no puede decir que no hemos hecho todo lo
posible para facilitar la apertura del nuevo hospital», desde el
momento en que se modificó el plan de obras para situar la rotonda
de acceso donde el Insalud lo solicitó.
Como ya publicó este rotativo, el Govern pidió "a petición de
Cort" a la Moncloa que las obras correspondientes al Ajuntament de
Palma estuvieran a cargo del Plan de Carreteras, con los resultados
conocidos.
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