El Govern ha dado el primer paso para aceptar las competencias de
Sanidad. El Ejecutivo balear ha llegado a un acuerdo con el
Ministerio de Administraciones Públicas para aceptar las
competencias sanitarias, aunque falta una reunión decisiva con el
Ministerio de Hacienda, que se celebrará el día 26, para cerrar
definitivamente el acuerdo, según informó ayer el portavoz del
Govern, Antoni Garcias. El principal escollo de la negociación
sigue siendo la reclamación por parte del Govern de los 27.000
millones correspondientes a las inversiones que tiene pendientes el
Insalud en Balears.
En caso de que el día 26 se cierre el acuerdo, el Consejo de
Ministros aprobaría al día siguiente el decreto por el cual se
traspasarían las competencias de Sanidad a Balears a partir del 2
de enero. El Govern no necesita reunirse el día 28 para ratificar
el acuerdo. De hecho, el gabinete no se reunirá el próximo viernes.
Desde Madrid, el Ministerio de Sanidad asegura que las
negociaciones con el Govern «van bien» a la espera de cerrar el
aspecto económico del traspaso de las competencias. Madrid asigna
la asignación económica a cada comunidad autónoma en función de su
población. De esta manera, Extremadura ha obtenido 159.000 millones
y Madrid, más de 600.000 millones. El Ejecutivo lo tiene todo
preparado para aceptar, como ya lo han hecho Extremadura y
Castilla"La Mancha, las competencias sanitarias.
El Govern no tiene otra salida. En caso de no aceptar la
transferencia por culpa de los 27.000 millones que reclama para
inversiones sanitarias, Balears podría perder, en sólo un año, casi
18.000 millones, que llegarán a las arcas de la Comunitat Autònoma
gracias al nuevo sistema de financiación autonómica. Es decir,
Balears perdería casi 80.000 millones de financiación durante los
cuatro años de vigencia del nuevo modelo. Sin embargo, el Govern
reitera que Madrid debe pagar la inversión prevista para remodelar
el hospital Son Dureta y el hospital de Maó, además de construir el
hospital de Inca. Además, el Govern tendría un desfase de 18.000
millones en los presupuestos que fueron aprobados el pasado
miércoles, lo que obligaría a realizar un gran recorte económico
durante el próximo ejercicio. Al margen de los detalles económicos
que pueden concretarse y resolverse el día 26, el Govern ya sabe
cómo comenzará a gestionar las competencias de Sanidad a partir de
enero.
El Ministerio de Administraciones Públicas y los técnicos del
Ejecutivo han fijado un plazo mínimo de seis meses para cogestionar
las competencias. Durante ese tiempo, el Insalud colaborará con la
Conselleria de Sanitat para que el traspaso administrativo del
servicio sanitario se haga sin ningún tipo de problemas que pueda
repercutir negativamente en los usuarios. La intención del Govern
es que los ciudadanos no sufran los lógicos inconvenientes que
podrían producirse ante un traumático traspaso de poderes. Desde el
gabinete autonómico recordaban ayer que el traspaso pleno de las
competencias de educación tardó dos años en producirse.
Durante los próximos meses la Conselleria de Sanitat deberá
decidir si mantiene la sede del Insalud de la calle Reina
Esclaramunda. Dicho inmueble está alquilado por el Insalud, y el
Ejecutivo todavía no ha decidido si lo continuará utilizando o, por
el contrario, si alquilará otro local para la gestión
administrativa del servicio. La todavía sede del Insalud se
encuentra a escasos metros de la Conselleria de Sanitat. Además,
otra cuestión que preocupa es cómo se coordinará el traspaso de los
6.000 funcionarios del Insalud que, a partir de enero, pasarán a
depender de la Comunitat Autónoma. Durante los últimos años la
Conselleria de Sanitat ha trabajado para evitar problemas de
funcionamiento por el traspaso de la actual plantilla que tiene el
Insalud en Balears, aunque quedan algunas cuestiones pendientes,
según reconocieron ayer desde el gabinete autonómico.
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