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Las federaciones de transportes de los sindicatos CC OO, UGT y resto de centrales sindicales negociarán con Iberia hasta el 31 de enero el plan de regulación de empleo a aplicar en Balears, en el que la compañía aérea tiene un colectivo laboral entre fijos y fijos discontinuos de mil trabajadores. Desde Iberia apuntan que no hay nada decidido, «puesto que simplemente se ha aprobado el plan de regulación laboral de la compañía y ahora toca negociar con los sindicatos, al mismo tiempo que durante el mes de enero se da la posibilidad a aquellos trabajadores de la compañía que quieran tramitar su baja voluntaria o pedir la reducción de jornada laboral u otros sistemas compensatorios. En el transcurso de la feria Fitur se notificará oficialmente la resolución adoptada en este sentido».

El plan presentado por Iberia contempla sólo bajas voluntarias que afectarán a nivel general a 207 pilotos, 520 tripulantes de cabina de pasajeros, 13 oficiales técnicos de a bordo (antiguos ingenieros de vuelo) y 1.775 trabajadores de tierra. Las bajas se llevarán a cabo mediante prejubilaciones, bajas incentivadas, recolocaciones diferidas, por medio de extinciones de contrato por un tiempo de determinado con garantía de recolocación, y novación de contrato a empleo estable (reducción temporal de tiempo de trabajo).

La extinción de 2.515 puestos de trabajo forma parte de un plan «anti-crisis» que también contempla la reducción en un 11% de su oferta de vuelos, la anulación de los contratos de «wet lease» (arriendo de avión y tripulación) y la puesta en marcha de un programa de reducción de costos de 54 millones de euros (47'4 millones de dólares) en 2002 y la misma suma en 2003. Con este plan, Iberia pretende ahorrar un total 132.942 millones de pesetas (702 millones de dólares) en 2002.

La aprobación del plan de regulación de empleo por el Gobierno conlleva, asimismo, el traslado de la base aérea de Palma a Madrid, aunque se mantendrá operativa la división comercial de la aerolínea por ser una de las más rentables de todo el país. Este traslado de la base afectará a todo el colectivo de trabajadores de tierra y pilotos, cuyo organigrama laboral será tramitado desde Madrid para opmitizar costes operativos. El traslado de bases también afectará a la de Málaga, Tenerife y Las Palmas, al mismo tiempo que no se descarta que la misma medida afecte también a la base de Iberia en Barcelona.