P. Candia04/01/02 0:00
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Ante la escasa incidencia de la huelga convocada por los trabajadores de la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH) en Balears, que no se ha traducido en la formación de colas de coches en las gasolineras, los trabajadores han decidido radicalizar el conflicto. Según confirmó a Ultima Hora el dirigente de UGT, Pedro Bennásar, una parte de la plantilla intentará hoy, viernes, impedir la salida de camiones cargados con combustible desde las instalaciones de CLH en Son Banya. «Vamos a ver qué ocurre con una movilización más decidida, porque hasta ahora, parece que nos están tomando el pelo con los servicios mínimos del 70 por ciento», explicó.

El segundo día de la primera tanda de paros, que concluirán mañana, sábado, la actividad fue «absolutamente normal», según confirmó el presidente de la Asociación de Gasolineras de Balears, Jesús Salas. «Ninguna gasolinera registró colas y todos los usuarios fueron atendidos con prontitud, así que tal y como van las cosas, nosotros creemos que no habrá problemas de desabastecimiento en las Islas», indicó. Bennásar, por su parte, explicó que de los 40 camiones diarios que salen desde Portopí cargados con fuel, «sólo 10 lo hicieron como estaba previsto». «No sabemos las razones, pero ese servicio no se realizó como en otras ocasiones», dijo.

El tráfico aéreo, en cambio, sigue siendo el que más está notando el conflicto planteado por los trabajadores de CLH. La compañía aérea Spanair operó ayer con retrasos de entre nueve minutos y casi dos horas, en tanto que en Air Europa fue irrelevante la incidencia de los paros. Portavoces de ambas compañías explicaron que, en el caso de Spanair, cuya base de operaciones está en Palma, registró retrasos de entre nueve minutos y media hora. Si embargo, al menos tres vuelos desde Madrid y Barcelona a Eivissa sufrieron demoras considerables el pasado miércoles.

Air Europa, que también opera desde Palma, registró una incidencia irrelevante, según su portavoz, con algún retraso que no supera los siete minutos. Estos retrasos se suman a los que Iberia ha tenido en diversos vuelos que tuvieron que aplazar su salida en una hora. El resto de las operaciones de vuelo de la compañía discurrió con normalidad, según fuentes de la empresa en Madrid.