La presidenta del Consell de Menorca, la socialista Joana Barceló,
consideró ayer que el auto dictado por el Tribunal Constitucional
que levanta la suspensión cautelar de la ecotasa, ofrece al Govern
la oportunidad de pactar con turoperadores y empresarios hoteleros
la aplicación del impuesto turístico «desde una posición de
fuerza». «Prefiero retrasar la aplicación de la ecotasa si
conseguimos el consenso con el sector turístico», resaltó.
«Es cierto que esta temporada presenta especiales dudas, por
ello, sin renunicar a la aplicación del impuesto, soy partidaria de
pactar con el sector. Si para llegar a un acuerdo tenemos que
retrasar el cobro del impuesto, valdrá la pena», concluyó.
«En todo caso, lo importante es que el máximo tribunal ha
valorado el interés general por encima del particular y los
conceptos de naturaleza y cultura, como destinatarios de
inversiones públicas». Barceló destacó que el Constitucional
reconoce la potestad fiscal del Parlament Balear, «mientras el
Ejecutivo central responde siempre a iniciativas tributarias vía
recursos de inconstitucionalidad», y dijo también que «no se ha
probado que la ecotasa reste competitividad al turismo».
La presidenta del Consell de Eivissa y Formentera, Pilar Costa,
se negó a expresar su postura. Por su parte, el vicepresident del
Govern, Pere Sampol, aseguró ayer que «no hay elementos objetivos»
para sentenciar que la economía de las Islas está atravesando un
periodo de crisis y, por lo tanto, el Ejecutivo autonómico reafirmó
su voluntad de aplicar la ecotasa a partir de marzo. El Govern
confía en que la sentencia definitiva sea «muy satisfactoria» a las
tesis que defiende la Comunidad Autónoma, dijo Sampol.
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