El sindicato CC OO presentó ayer unos datos sobre siniestralidad
laboral en la hostelería correspondientes a 2000 en los que se
refleja que el 28 por ciento y 18'5 por ciento de los 7.535
siniestros del sector fueron consecuencia, respectivamente, de
«caídas» y de «choques contra el mobiliario» en el puesto de
trabajo y como consecuencia del «sobreesfuerzo». Estos datos los
explicó Rafael Borrás, secretario general de la Federació de Comerç
i Hosteleria de CC OO-Illes (Fecoht), como presentación de
propuestas para el desarrollo del actual convenio colectivo de
hostelería en las Islas.
Borrás explicó que no es aconsejable empezar la negociación del
nuevo convenio si antes no se han resuelto éste y otros compromisos
incluidos en el actual, al tiempo que tampoco es posible «dar la
espalda» a las recomendaciones de la Conselleria de Treball de
incorporar a la negociación colectiva la cuestión de la prevención
de los riesgos laborales. «No hacerlo sería una irresponsabilidad»,
continuó el responsable de la federación, quien agregó que cuatro
de los accidentes registrados en el ramo en 2000 fueron mortales,
mientras que otros 78 se englobaron en la categoría de graves.
Acompañado del secretario d'Acció Sindical de la Fecoht, Ginés
Díez, Rafael Borrás aseguró que ha remitido a las patronales y al
sindicato UGT un documento con la propuesta de crear una comisión y
otras iniciativas que, hasta el momento, ha tenido como respuesta
el «silencio administrativo». Además de mejorar la salud laboral en
el sector, el sindicato exige el cumplimiento de otros pactos
establecidos en el actual convenio, como por ejemplo la adaptación
de las categorías profesionales al acuerdo laboral estatal de
hostelería, que según Borrás todavía no se ha cumplido. Según el
sindicato tampoco se han acatado los acuerdos relativos a la
elaboración de un nuevo anexo de establecimientos afectados por el
convenio, ni la actualización de las condiciones en que deben ser
contratados los servicios extraordinarios para eventos
especiales.
Por otro lado, el responsable de la federación declaró que el
sindicato no ha decidido aún el porcentaje de subida salarial que
pedirá para el próximo convenio pero recordó que, en cualquier
caso, «las peticiones de moderación de la patronal no han de ser
sinónimo de pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores».
Aunque Borrás confió en poder negociar actuaciones conjuntas con
UGT y lamentó que el diálogo con este sindicato y las asociaciones
empresariales respecto al convenio del sector «no sea más
continuado y se limite a sólo unos meses» y abogó por un mayor
entendimiento entre los representantes sindicales.
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