La Comandancia General de Balears, a través de la oficina de
comunicación, confirmó ayer que ha aplicado «medidas disciplinarias
correctivas» por el consumo de bebidas alcohólicas de forma
irregular en el transcurso de las maniobras celebradas en Cap Blanc
entre los días 5 y 8 de febrero. Pese a todo, y tras estudiar la
información previa sobre lo ocurrido en esas maniobras, la
institución castrense deduce que «en absoluto se produjo una
ingestión desmesurada de bebidas y que no existió personal alguno
con coma etílico». Señalan, igualmente, que la venta de bebidas
estuvo siempre localizada en la cooperativa (remolque tipo
cafetería) que se estableció durante las maniobras para atender a
los soldados y cuadros de mando en el tiempo de descanso.
La Comandancia General de Balears tuvo conocimiento el pasado 13
de marzo de lo ocurrido en las maniobras de Cap Blanc, e inició la
correspondiente información previa, que dio como resultado que el 5
de abril de 2002 se adoptaran las pertinentes medidas
disciplinarias correctivas. «Es un hecho puntual y aislado que de
ninguna manera puede poner en entredicho la magnífica labor
realizada por los mandos y la tropa», dijo ayer a Ultima
Hora el teniente coronel jefe de la Oficina de
Comunicación de la Comandancia General de Balears, Antonio Ortiz.
«La legislación prohíbe de forma rotunda y contundente la ingestión
de bebidas alcohólicas durante las maniobras militares, por ello
actuamos de inmediato, tal y cómo reconoció el Defensor del
Soldado», añadió. El teniente coronel Ortiz remarcó que ésta es la
primera ocasión en que se produce un hecho de esta naturaleza en
Balears.
«En ningún momento existió peligro alguno con el probable uso
indebido de las armas, ya que éstas se almacenan bajo estrictas
medidas de seguridad y quedan en custodia una vez que finalizan las
maniobras diarias», indicó. Con respecto al número de mandos
expedientados y la sanción que ha recaído en ellos por permitir la
ingesta de bebidas alcohólicas durante las maniobras en Cap Blanc,
el teniente coronel Ortiz afirmó que esos temas correspondían a
«información confidencial» que no podía desvelar. En declaraciones
realizadas ayer a Ultima Hora-Radio, el Defensor del Soldado
expresó su preocupación por los hechos registrados en Mallorca,
recordando la expresa prohibición existente de que se permita el
consumo de bebidas alcohólicas durante la celebración de
maniobras.
El teniente coronel Ortiz, por su parte, insistió en que se
trató de un hecho «aislado», y recordó que la venta de bebidas
alcohólicas fue «algo excepcional» de las que los mandos han tomado
«debida nota» a través del expediente informativo que se abrió en
su momento. La Ley Orgánica de Régimen Disciplinario de las Fuerzas
Armadas exige la prohibición absoluta del consumo de bebidas
alcohólicas. Con respecto a la versión de que una soldado sufrió un
coma etílico durante las maniobras de Cap Blanc, el teniente
coronel se remitió al comunicado oficial e insistió en que ese
extremo «no se produjo». Uno de los artículos de la Ley de Régimen
Disciplinario contempla el consumo de alcohol en actos de servicio,
como las maniobras, como una falta grave, especialmente, si la
tropa maneja armas de fuego.
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