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El president del Govern, Francesc Antich, acusó ayer al ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, de actuar «con nocturnidad y alevosía» en la regeneración de las playas de Mallorca afectadas por el temporal de noviembre. Antich atacó con dureza al ministro durante una cuestionó formulada por el portavoz del grupo popular, José María González Ortea, quien preguntó al president su postura en relación a la regeneración de las playas. «Habrá que poner vigías en las torres de defensa porque donde pasa Matas, arrasa», ironizó Antich, quien aclaró que «una cosa son las actuaciones urgentes en las playas y otra cosa son las obras de regeneración que impulsa el Ministerio de Medio Ambiente».

Antich lamentó que «Matas pida permiso para recoger arena del Cap Salines, pero con nocturnidad y alevosía envíe un barco a Banyalbufar». «Matas está aprovechando las obras de emergencia para realizar otros proyectos en las playas», añadió el president, quien se mostró a favor de que se recupere la costa en el mismo estado que se encontraba antes del temporal de noviembre. González Ortea lamentó que el Govern, en lugar de colaborar con el Ministerio de Medio Ambiente, «sólo ponga zancadillas». «El Ministerio ha actuado con rapidez», recalcó el portavoz del PP. Antich precisó que el Govern no ha colaborado con el Ministerio de Medio Ambiente «porque nadie nos lo ha pedido». El president del Govern recordó que, en cambio, Matas sí ha colaborado con el Ayuntamiento de Barcelona en la regeneración de playas.

El portavoz del PP esgrimó que la oposición de Antich a la regeneración de playas se debe «al miedo que tiene a que Matas le quite la silla». «Le recuerdo que la única vez que le he disputado la silla a Matas he ganado», respondió Antich, quien llamó «El Trampas» al ministro de Medio Ambiente. Durante el pleno de ayer, el PP criticó al Govern por «no tener modelo territorial». El diputado Jaume Font aseguró que «el miedo generado entre la población balear ha supuesto que se disparen hasta 3.848 las licencias concedidas en suelo rústico de Mallorca entre 1995 y 2001». Font aseguró que la política territorial del Pacte «ha fracasado» porque, en su opinión, «cada partido piensa de forma distinta y no existe acuerdo».

Font preguntó al conseller d'Obres Públiques, Francesc Quetglas, si el Govern piensa adoptar algún tipo de solución ante la falta de acuerdo en el Consell para aprobar unas cuotas en suelo rústico. Quetglas respondió que la política del Pacte se ha dirigido a solucionar «la desprotección territorial propiciada por los gobiernos autonómicos del PP». Por otro lado, la consellera de Medi Ambient, Margalida Rosselló, volvió a reconocer en el Parlament que «la tala de cipreses en la carretera de Valldemossa es algo que no tenía que haber pasado». «Espero que el conseller d'Obres Públiques lo tenga en cuenta», dijo Rosselló.