El palacio de deportes de Inca estaba a rebosar, los mayores no cabían en las gradas.

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Cinco mil personas, entre participantes y familiares, abarrotaron ayer el palacio municipal de deportes de Inca en la final del programa «Gent Gran en Marxa» que organiza el Consell Insular de Mallorca y que alcanza este año su tercera edición.

El programa, dirigido a los ancianos de los distintos municipios de Mallorca, contribuye a mantener en forma a nuestros mayores que además se relacionan con sus convecinos.

«Gent Gran en Marxa» va sumando adeptos año a año y en esta ocasión apenas cabían en el pabellón municipal. Algunos grupos esperaban nerviosos en la calle a que llegara su turno para poder acceder al palacio de deportes. Los jubilados realizaron sus tradicionales tablas de ejercicios guiados por un eficiente equipo de monitores. Ayudados por aros de gimnasia, globos e incluso escobas llenaron de colorido las pistas.

Las danzas son también una buena opción para mantenerse en forma, además contribuye a fomentar las relaciones de grupo, según los expertos. Precisamente, los mayores que deben enfrentarse a barreras físicas se atrevieron el año pasado con las primeras danzas para participar de esta gran exhibición anual. La experiencia fue exitosa y este año por primera vez los impedidos físicos que precisan silla de ruedas participaron de las tablas de gimnasia. También tomaron parte otros grupos de discapacitados, como los miembros de la ONCE o los enfermos de parkinson.

Por primera vez la consellera de Presidència, Dolça Mulet, ocupaba el palco presidencial como la «consellera de la tercera edad». Disfrutó especialmente del espectáculo acompañada de la presidenta del CIM, Maria Antonia Munar, y del alcalde de Inca, Pere Rotger, entre otros. Juntos entregaron al popular personaje televisivo «madó Pereta» una placa conmemorativa entre los vítores y aplausos de los asistentes.

La presidenta del CIM, Maria Antonia Munar, destacó la dedicación de los mayores a este tipo de programas, presentó oficialmente a los ancianos a su consellera Mulet y prometió que hay marxa para rato.