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La conferencia que celebra el PSIB el próximo 6 de julio servirá para ratificar la plena confianza de los socialistas en el Pacte de Progrés. En el documento que analizarán, se hace una apuesta por el Pacte, a pesar de los «problemas de funcionamiento», especialmente con una situación delicada en el Consell, según segura el secretario de Organización del PSIB, Damià Cànoves.

«Hay ocasiones en las que el Pacte ha funcionado de forma más complicada, pero intentaremos que los problemas que haya podido haber no se vuelvan a repetir», dijo. La conferencia que celebran los socialistas será una demostración evidente de que la división del PSOE es historia. «El hecho de que Antich sea president ha hecho aumentar estas sinergias positivas», dijo. «En el partido no existen ya ni sectores ni divisiones».

Además de la plena ratificación del Pacte y de la opción de Antich, la conferencia pretende ser además el punto de partida para ratificar la apertura del partido a otros colectivos sociales. «Estamos haciendo apuestas importantes para abrir el partido, pero para eso es imprescindible que seamos un partido fuerte».

En la conferencia participarán 300 personas, de las que 200 son elegidas por el partido y unas 100, representantes sociales. Esa necesaria apertura se combina con el mantenimiento del «aparato» del PSIB. «El aparato es necesario, pero no tiene que impedir que pueda entrar gente nueva», dijo el dirigente socialista.

Esta apertura conecta con lo que se ha dado en llamar Operación Antich. «Es la integración de toda una serie de gente que no quieren tener un carné, pero apoyan a Francesc Antich como president». La conferencia definirá además el programa electoral y permitirá que participe gente «que quiere defender un proyecto progresista y se sienta con ganas de apoyar a Antich».