Josep Maria Aguiló09/07/02 0:00
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En mayo de 2000 el Ajuntament de Palma puso en marcha una iniciativa pionera en toda España: la de condonar una multa a cambio de que la persona sancionada acudiese a una clase de educación vial. Desde entonces han pasado por las aulas del cuartel de la Policia Local un total de 808 personas, 600 de ellas entre los años 2000 y 2001. En lo que llevamos de año se han inscrito en estos cursos, denominados «Respectant hi guanyam tots», 175 palmesanos.

Normalmente suele haber una media de 30 personas por curso y éste sólo dura una sola clase. Cada año se realizan unos doce cursos. Las clases son impartidas por el pedagogo Macià Ensenyat, el psicólogo Sebastià Lladó y los policías locales Gabriel Torres y Joan Tur.

Para poder acceder a uno de estos cursos se requiere que en el último año la persona que ahora se quiera inscribir sólo ha de haber recibido una multa, siempre y cuando esta multa no se haya puesto por exceso de velocidad, por una situación que entrañase peligro o por ORA.

Descartadas estas excepciones, pueden condonar sus sanciones aquellos ciudadanos que hayan realizado alguna infracción en zona VAP, o que hayan aparcado mal o que no hayan llevado el casco puesto si iban con moto. Dependiendo de los casos, el conductor se ahorra entre 30 y 180 euros.

Cada clase empieza con una introducción, en la que se explica el objetivo y el contenido del curso. A continuación se emite un vídeo y por último hay una charla con los alumnos en la que se les recuerda que este curso es en beneficio de la colectividad y suyo. Al final se les reparte una encuesta para que hagan una valoración del curso.