El juez instructor del «caso Formentera», Antoni Monserrat, dictó
ayer un auto por el cual insta a las partes personadas a que
presenten sus respectivas alegaciones en el plazo de seis días.
Esas alegaciones, junto con los recursos de apelación de las
acusaciones particulares (PSOE-EU y PSM) serán elevados por el
magistrado a la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de
Justicia de Balears.
El «caso Formentera» entra, de esa forma, en una fase decisiva
tras la devolución de la causa por parte del Tribunal Supremo al
juez Monserrat al no hallar indicios de la comisión de delito
alguno por parte de los aforados, el ministro de Medio Ambiente,
Jaume Matas, y la diputada nacional del PP, Rosa Estaràs. El juez,
por su parte, dictó el auto de archivo después de declarar el
secreto de las actuaciones durante 48 horas. En ese período de
tiempo, el magistrado encabezó una comisión judicial que se
desplazó hasta las oficinas del Registro Electoral.
Hasta ahora, todas las partes han mantenido sus respectivas
tesis en la supuesta trama de captación irregular de votos por
parte del PP en las anteriores elecciones autonómicas, con
excepción del Ministerio Fiscal. El nuevo fiscal jefe, Bartomeu
Barceló, cambió el criterio establecido por su antecesor en el
cargo, Antonio de Vicente Tutor, y se abstuvo de presentar recurso
alguno en contra del archivo del «caso Formentera».
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