Los estudiantes de Magisterio y de Educación Social de la UIB
protagonizaron una protesta contra la ley de calidad durante toda
la jornada de ayer, incluida la madrugada, ya que varias decenas de
alumnos se encerraron desde las 21.30 horas hasta las 7.30 de esta
mañana en el edificio Guillem Cifre de Colonya, donde han pasado la
noche.
Convocada por la Junta de Representantes de Magisterio, la
Coordinadora d'Estudiants del Països Catalans (CEPC) y la Asamblea
de Estudiantes de Educación Social de la UIB, la jornada arrancó
por la mañana con un pasacalles por todos los edificios del campus,
anunciando y convocando a los estudiantes a sumarse a la
protesta.
Una representación teatral sirvió para expresar el rechazo
estudiantil a la que definieron como «la ley educativa más
antidemocrática de la historia». Por la tarde se celebró una mesa
redonda, en la que participaron el conseller d'Educació, un
representante del STEI, de la Feapa, de la Junta de Representantes
de Magisterio, de la CEPC y de la Asamblea de Estudiantes de
Educación Social de la UIB.
Por la noche se celebró un concierto en el vestíbulo del
edificio, tras el cual dio comienzo el encierro de los alumnos, que
habilitaron dos aulas del inmueble. Los estudiantes de Magisterio
consideran que la nueva ley «supone un paso atrás, con aspectos muy
peligrosos como la segregación de alumnos que propone, la
consideración de la etapa 0-3 años como asistencial o el abandono
del catalán y la cultura catalana», apuntó Josep Bernat Sánchez,
uno de los alumnos que esta noche se ha encerrado.
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