Tal y como estaba previsto, el pleno celebrado ayer en Cort aprobó,
de manera definitiva, la ordenanza que regulará los horarios y las
condiciones de los locales de ocio. La nueva normativa contó con
los votos favorables del PP, PSM-EN y UM, y la abstención del
PSIB-PSOE y de EU-EV. El acuerdo también prevé la creación de una
comisión mixta de seguimiento de la ordenanza, integrada por
restauradores, vecinos y Cort. La normativa entrará en vigor a
mediados de marzo.
Por otra parte, el pleno acordó, por unanimidad, aprobar de forma
inicial el proyecto presentado por la Conselleria de Salut i Consum
de modificación puntual del Pla General d'Ordenació Urbana (PGOU)
de Palma, en concreto del artículo 233, para permitir la reforma y
ampliación del hospital de Son Dureta. La modificación del PGOU es
indispensable en este caso, ya que el proyecto prevé incrementar en
unos 80.000 metros cuadrados la edificabilidad actual. Tras esta
aprobación inicial, el acuerdo será remitido al Consell de Mallorca
para que se pronuncie sobre el mismo y a la vez será sometido a
información pública para que puedan ser presentadas alegaciones.
Todo el proceso durará alrededor de un año.
La norma recoge que los locales con música no podrán abrir antes
de las 16.00 horas ni, en el caso de las discotecas, cerrar más
allá de las 06.00 horas, lo que imposibilitará de hecho la
existencia de los after hours. La ordenanza también prevé que sa
Llonja pase a ser Zona de Especial Protección (ZEP). De este modo,
los establecimientos con música de la zona deberán cerrar a la una
de la madrugada de lunes a jueves y a las tres de la madrugada de
viernes a domingo.
En el debate sobre la normativa intervino la portavoz de la
Associació de Veïns del Puig de Sant Pere, Feli Marcos, quien si
bien reconoció los avances que suponía esta nueva normativa con
respecto a la regulación anterior, dijo que era una medida
«totalmente insuficiente», para añadir que los vecinos de sa Llonja
no percibían que el equipo de gobierno estuviese interesado en
«solucionar el problema del ruido». Por último, pidió que todo el
casco antiguo fuese considerado como ZEP. Por su parte, la
Asociación de Bares Musicales de Palma señaló el pasado miércoles
que estará a la expectativa de cómo aplica Cort la normativa, pues
también mostró sus recelos a la misma.
Tanto el PSIB-PSOE como UM defendieron la necesidad de una
zonificación de las áreas de ocio en Palma, al considerar que cada
barriada tiene unas peculiaridades en cuanto al tipo de locales de
ocio que tiene y a su posible repercusión sobre los vecinos. El
alcalde de Palma, Joan Fageda, señaló que el equipo de gobierno no
descartaba la posibilidad de una futura zonificación, pero señaló
que antes era necesario comprobar el funcionamiento de la nueva
normativa.
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