Las personas más afectadas por este tipo de actuaciones
delictivas suelen ser personas mayores que viven solas y que son
engañadas de manera deliberada por dichos operarios. La directora
general de Indústria, Francisca Vives, indicó ayer que el Govern
sigue la pista a otras dos empresas a las que se ha detectado
actuando en similares circunstancias.
Vives explicó que «los operarios de estas empresas, que
normalmente no disponen de certificado de instalador, visitaban
domicilios particulares, muchas veces diciendo que iban en nombre
de Repsol o del mismo Govern, para revisar los aparatos de gas»,
destacó. Según avanzó ayer la policía, por cada trabajo hecho, que
solía consistir en cambiar la goma y la válvula de las bombonas,
cobraban entre 200 y 900 euros.
Hasta el momento se han contabilizado 35 denuncias, pero se
espera que la cifra aumente ya que muchos estafados creían en la
legalidad de las revisiones. Desde la Direcció General d'Indústria
se hacen una serie de recomendaciones para evitar estafas en la
revisión del gas.
Así, se recuerda que las inspecciones de las instalaciones se
han de hacer cada cuatro años de forma obligatoria y que existe una
total libertad para elegir la empresa que se considere de confianza
para realizar este trabajo. Se recomienda también pedir un
presupuesto antes de la revisión, así como la documentación del
instalador. Indústria dice que se ha de desconfiar de operarios que
pretendan hacer el trabajo con presiones y amenazas, y que en estos
casos se presenten las pertinentes denuncias.
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