La residencia psicogeriátrica de Palma será inaugurada el 5 de
mayo, dispondrá de 76 plazas para personas mayores de 65 años que
padecen demencias seniles y responde al propósito del Govern balear
de «trabajar por un país en el que todos vivan con dignidad»,
afirmó ayer el president Francesc Antich.
La empresa Necso Entrecanales y Cubiertas ha sido la responsable
de llevar a cabo las obras de reconversión de la conocida como
'Casa Gran' del antiguo Hospital Psiquiátrico en residencia
psicogeriátrica con un presupuesto de 5'5 millones de euros.
El presidente balear, la consellera de Salut i Consum, Aina
Salom, y el gerente de Gesma, Josep Carbonero, realizaron ayer una
visita al edificio, donde se trabaja con celeridad para tener a
punto la reforma para el mes de mayo.
Las obras han servido para recuperar y habilitar la 'Casa Gran',
un edificio emblemático de 1901 que dará acogida a 76 enfermos
repartidos en 38 amplias habitaciones con baño asistido, una unidad
de atención máxima y una habitación de vigilancia extrema.
Antich aseguró ayer que con la apertura del psicogeriátrico
«recuperamos un poco la dignidad que se había perdido» debido a la
mala situación en la que se encontraban los enfermos mentales del
hospital psiquiátrico, que en realidad era un «almacén de
personas», apostilló el president.
Es una «gran satisfacción», añadió Antich, que los enfermos que
se encuentren a partir de a hora en el Psicogeriátrico «puedan
contar con todos los servicios que necesitan».
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