El último pleno de la legislatura 1999-2003 en Cort y también el
último presidido por el alcalde en funciones de Ciutat, Joan
Fageda, primer edil durante doce años, se celebró ayer. Estuvieron
presentes casi todos los concejales. Tan sólo faltaron Carme Feliu
y Pedro Àlvarez, por el Partit Popular, y Ferran Trujillo, por Unió
Mallorquina.
Tal como establece la Ley de Bases de Régimen Local y el propio
reglamento del Consistorio palmesano, el pleno de ayer fue
puramente de trámite, es decir, tenía como objeto la culminación de
diversos actos administrativos, que siempre requieren la aprobación
del acta anterior, para comprobar si el texto que se aprueba
coincide con lo que se dijo en dichos actos administrativos
previos. Cabe recordar que a lo largo de las últimas semanas se han
ido celebrando las distintas juntas generales de las empresas
municipales, así como las diferentes comisiones y juntas rectoras
de los organismos municipales. De este tipo de reuniones siempre se
levanta un acta y se aprueba con posterioridad, y esto fue lo que
se hizo ayer.
Tras la Comissió de Govern, en la que no hubo ningún punto, se
aprobó el acta de la junta rectora del Institut Municipal
d'Informàtica. A continuación, empezó ya el plenario, aprobándose
sucesivamente las actas de las juntas generales de EMAYA, de la
EMT, de la Empresa Funerària Municipal y de la Societat Municipal
d'Aparcaments de Palma.
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