La huelga de ambulancias fue desconvocada ayer a última hora de la
tarde tras una reunión «in extremis» entre la patronal y los
representantes de los trabajadores en el Tribunal de Arbitraje y
Mediación de las Illes Balears (TAMIB). Las cuatro empresas
concesionarias del servicio en el ámbito autonómico forzaron el
encuentro con el comité de huelga cuando los efectos de ésta ya se
habían iniciado. «Como muestra de buena voluntad de cara a la
reunión», CC OO desconvocó al mediodía la huelga en los servicios
de urgencias, que se prestaron prácticamente al 100 por cien, y la
mantuvo sólo en los servicios programados, que se vieron afectados
desde las 3 hasta las 7 de la tarde, principalmente.
Como se recordará, la huelga, aunque indefinida, era sólo
parcial y consistía en la rebaja de los turnos de 12 horas a 8. Los
afectados por el recorte de prestaciones en los servicios
programados fueron unos 600 (un 50% de la programación del día),
incidiendo sobre todo en personas que necesitan ambulancias para
desplazarse hasta centros de rehabilitación. Sin embargo, estos
afectados fueron avisados con antelación del conflicto laboral y ya
sabían que ayer no podrían realizar sus programas habituales de
rehabilitación.
En total fueron unas 70 las ambulancias las que dejaron de
funcionar durante al menos cuatro horas, el tiempo necesario para
enlazar dos turnos de ocho horas que, en condiciones normales, son
de doce. Las 25 ambulancias asignadas a servicios de urgencias
funcionaron con normalidad. Todos los casos realmente urgentes se
atendieron. El origen del conflicto laboral estaba en la firma del
convenio colectivo autonómico, prevista para el pasado 30 de mayo.
Este convenio, acordado previamente por las dos partes, establecía,
entre otras cuestiones, un complemento mensual progresivo que en 4
años debe llegar a los 360 euros. Esta mejora salarial correría a
cargo de la Administración autonómica.
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