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Durante toda la jornada de ayer la Residencia Borenco celebró varios actos para conmemorar su décimo aniversario. Entre otros, un almuerzo al que acudió Dolça Mulet, consellera de Cultura del Consell Insular de Mallorca.

Esta residencia ubicada en el Terreno empezó la fiesta con música de xeremies. Después el párroco de el Terreno, Sebastià Miralles, ofició una misa para, a continuación, reunirse en el comedor del centro con los residentes y los invitados a la fiesta.

Por la tarde actuó un coro rociero y la Coral Montepío de Santa Catalina. Asimismo, se contó con la actuación de varios grupos de ball de bot, que cerraron el acto.