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Para evitar que las calles de Palma queden anegadas por las lluvias torrenciales que anuncian los expertos en metereología, Emaya ha puesto en marcha un dispositivo especial de limpieza. Las actuaciones van dirigidas a la red pluvial de Palma así como a sumideros e imbornales. En la actualidad Emaya tiene inventariado en el término municipal de Palma un total de 22.532 imbornales que, en teoría, son periódicamente revisados y limpiados. La eficacia de esa labor se demostrará en cuanto caigan las primeras lluvias torrenciales.

El año pasado esta empresa procedió a limpiar más de 21.300 imbornales, de los que sacó más de 412.730 kilos de fango. También realizó reparaciones en 252 sumideros que presentaban desperfectos.

Es la carrera de este año contra la temida gota fría que se forma en las capas altas de la atmósfera, que puede dejar 30 litros de agua por metro cuadrado en una hora.