Antoni Roig, en el centro, con el resto de la candidatura con la que se presentó a las elecciones municipales.

TW
0

El nuevo organismo que dirigirá la política municipal, y en el que participará Antoni Roig mientras sea portavoz del partido en Cort (puesto que, de momento, no abandona) no es una gestora propiamente dicha, ya que la dirección del partido no ha incluido a nadie, sino la traslación a los estatutos del partido en las Islas del reglamento federal, que establece que «en los municipios con más de 300.000 habitantes» la dirección corresponderá a «una coordinadora que estará compuesta por todos los secretarios generales de las agrupaciones locales, el alcalde o portavoz municipal y los secretarios de los asuntos municipales y provinciales o regionales». En el PSOE balear, son las secretarías de Política Institucional, quienes se encargan de estos asuntos.

Por ese motivo, la presidenta del Consell de Menorca y destacada dirigente del PSIB, Joana Barceló, formará parte de la nueva dirección. Barceló es la secretaria de Política Institucional del PSIB. También en razón de su cargo (secretario de Política Institucional de Mallorca) se integra el ex alcalde de Alaró, Francesc Rosselló. Además de Roig, Barceló y Rosselló, formarán parte de la coordinadora Ramón Torres (Palma-Ponent), José Francico Hila (Llevant), Pedro Serra (Eixample) e Isabel Romero (Nord), en representación de sus agrupaciones locales. ¿Qué quiere decir todo esto? Pues que, de acuerdo a las diversas fuentes consultadas por Ultima Hora a lo largo de la tarde, aunque el nuevo organismo esté bajo la dependencia orgánica de la Federación Socialista de Mallorca (FSM) -que ayer ratificó el acuerdo-, el dirigente local con mayor peso en la coordinadora será Ramón Torres, un concejal populista que controla unos 400 afiliados de Palma Ponent.

«Dada la situación de la Federación Socialista de Mallorca, el trabajo de Barceló en el Consell de Menorca, que Roig es aún portavoz y que Torres dirige Ponent, lo que ha hecho Antich es sentarse sobre un bidón de pólvora», resumió confidencialmente a este diario su visión de lo ocurrido una fuente que generalmente está al tanto de los entresijos del partido. Antonio Roig fue breve: «Acato esta resolución, como no podía ser de otra manera y ya veremos como funciona». Sobre su continuidad en Cort dijo que «nadie me ha pedido que me vaya» y, preguntado si las conclusiones de la Conferencia Política convocada por la USP eran «papel mojado», explicó que «aunque la Unión Socialista de Palma vaya a dejar de existir, lo que se mantienen son sus militantes». El PSOE tiene ocho ediles en Palma. Al menos tres, se han mostrado críticos con el liderazgo de Antoni Roig.