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El teniente fiscal del Tribunal Supremo, José María Luzón, se ha dirigido a los magistrados de la Sala Segunda de ese Alto Tribunal para solicitar el archivo «definitivo» de todas la actuaciones en el «caso Formentera». En el escrito, Luzón señala que el «caso Formentera», «no puede tener otro final, como el parto de los montes que ha alumbrado un ratón, en este caso, muerto». La terminología empleada por el fiscal ha causado asombro y perplejidad en el PSM, una de las acusaciones particulares en la supuesta trama de delito electoral, y que se ha personado tras una negativa inicial por parte del Supremo. Luzón afirma que el «caso Formentera» se ha creado «sobre la base de unas supuestas pruebas que con evidente apariencia de ilícita obtención y manipulación se ha iniciado una causa cuya gestación se prolonga indefinidamente y que, a juicio de este Ministerio, y con todo el respeto que se merece la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB) no puede tener otro final, como el parto de los montes, que ha alumbrado un ratón, en este caso muerto, cual sería el de la inocua falsedad de la entrevista virtual a la señora Segura». Y añade: «Y ello sin perjuicio de lo resultante de las actuaciones realizadas en América por funcionarios públicos, sin que se haya determinado connivencia con los imputados en la causa». Luzón envió ese escrito como consecuencia de la exposición razonada enviada al Supremo por el juez instructor Antoni Monserrat para que la causa continúe siendo investigada en Madrid, debido a la condición de aforado de uno de los imputados, el senador Carlos Gutiérrez.