29/11/03 0:00
Durante nuestra estancia en la Base España, de Petrovek (Kosovo), el capitán mallorquín Alzamora, destinado allí por espacio de seis meses, en nombre de sus compañeros y subordinados, nos pidió dos cosas: que el Mallorca les enviara una camiseta firmada y que el Consell de Mallorca les mandara fotografías con vistas bonitas de la Isla. La intención era colocar la camiseta mallorquinista entre la del Madrid y la del Barça, colgadas ambas en una de las paredes de uno de los comedores; igualmente, en dormitorios y lugares del campamento que ellos frecuentan, colocar las fotografías sobre Mallorca, «como han hecho los compañeros de otras comunidades, y para que todo el mundo vea lo bonita que es nuestra Isla».
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