Los alumnos del colegio Joan Capó, en su mayoría castellanohablantes, reciben casi todas las clases en catalán. Foto: JAUME MOREY

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La multiculturalidad ha llegado a los colegios de Mallorca con más intensidad que nunca. El «Informe de l'alumnat estranger a les Illes Balears», elaborado por la Direcció General de Planificació i Centres de la Conselleria d'Educació i Cultura, arroja unos datos muy orientativos. En los centros educativos de Balears se encuentran en estos momentos niños y jóvenes de más de ¡100 países distintos! El conseller d'Educació, Francesc Fiol, apuntó que -«con los datos en la mano»- Balears podría situarse a la cabeza de la clasificación de las autonomías con mayor población relativa de estudiantes extranjeros, superando incluso a Madrid. Aunque estas cifras están aún pendientes de contraste definitivo, se trata de un buen indicador de lo que actualmente está «revolucionando» la enseñanza en nuestra comunidad.

Lo cierto es que los colegios están cambiando la composición del alumnado. El color de los estudiantes ya no es, en algunos centros, exclusivamente blanco. Los estilos de ropa e incluso las meriendas han cambiado. Hace poco, el director del colegio Jaume I, Sixto López, apuntaba: «Los nuevos tiempos se notan, de forma especial, en las comidas. Antes casi todos los niños venían con el clásico 'bocata', de pan con embutido o queso. Ahora, muchos vienen con tortas de maíz, y con otros tipos de bocados que nada tienen que ver con lo acostumbrado».

Por nacionalidades, el mayor número de alumnos extranjeros en Balears son los ecuatorianos (2.569 matriculados a 30 de septiembre de 2003), los marroquíes (2.381), alemanes (1.624) y los argentinos. Según datos también facilitados por Educació, en la Isla hay cuatro centros que concentran una gran amalgama de nacionalidades. Entre ellos hay que destacar, en primer lugar, el Màxim Alomar (con alumnos de 24 países), el Jaume I, el Arxiduc Lluís Salvador, el Ramón Llull. Sin olvidarse de otros, como el Josep Sureda i Blanes, el Aurora Picornell, o los de zonas costeras como Alcúdia, Calvià o S'Arenal.

Toni Limongi