Esta vez sí pudo ser. El sol acompañó ayer tarde las ruetes
escolares que no pudieron llevarse a cabo los pasados jueves y
viernes debido a la lluvia, como fue el caso del colegio San
Vicente de Paúl, de la barriada de la Soledat. Este año, el desfile
de Carnaval infantil estuvo dedicado al mar, por lo que los
disfraces fueron alusivos a sus más simpáticos y coloristas
moradores. A las cuatro de la tarde se reunieron en el patio del
colegio los participantes, esto es, desde los alumnos de la
escoleta e Infantil hasta sexto de Primaria.
Desde allí salieron para dar un rodeo por las calles de la
barriada, donde se encontraban expectantes sus familiares y amigos.
Los de la escoleta, lucieron disfraz de pez ángel, seguidos de los
alumnos de las tres clases de Infantil, disfrazados de pez payaso,
cangrejo, y peces de colores, acompañados por las maestras
Francisca Aguiló, Margarita Estarellas y sor Teresa Campillo.
Luego siguieron los de Primaria. Los de primero, acompañados por
su maestra, Magdalena Comas, se vistieron de caballito de mar; los
de segundo, de tortuga de mar, acompañados de Cristina Jordá; los
de tercero, de mejillón, con Rosa Fullana; los de cuarto, de foca,
junto a Joan Andreu; los de quinto, de pulpo, con María Antonia
Rosselló, y los de sexto, de estrella, con Magdalena Gelabert. Los
maestros también vistieron su disfraz de mar azul salpicado de
mariscos, peces y algas. Su confección corrió a cargo de ellos
mismos en colaboración con los padres y los alumnos, que se
afanaron en recortar los complementos de papel parís, consiguiendo
un armonioso y artístico resultado.
Amalia Estabén
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