El presidente del Parlament, Pere Rotger (del PP) apuntó ayer un
posible debate sobre la reforma del Estatut de Autonomía si bien
aclaró que un asunto de este calibre debería precisar del consenso
de todos los que lo aprobaron y un momento más propicio que no
fuera la campaña electoral. «Un periodo preelectoral no es un
momento propicio para llevar a cabo la reforma con calma, seny' y
responsabilidad», insistió Rotger, quien reiteró que, «reformas,
sólo las imprescindibles. Y cuando estén acabadas, cerrar el
proceso rápidamente».
En su opinión, hay que impedir «dejar puertas abiertas a otros
aspectos, ya que obviamente los autores intentarán aprovechar la
ocasión para introducir en el texto aquello a lo que renunciaron o
aparcaron durante la redacción inicial a causa de la búsqueda de
consenso». Fue el elemento más novedoso de su intervención, con
ocasión del 21 aniversario de su aprobación y, acto seguido, generó
toda una serie de comentarios.
Tanto en su intervención inicial como luego en sus declaraciones
a los medios insistió en que él no se pronunciaba sobre si la
reforma era necesaria o no, sino que introducía criterios para una
reforma. «Lo que ha hecho Rotger es decir que está listo para
iniciar la reforma del Estatut si se lo piden», interpretó el ex
president Antich. Para Munar (UM) la reforma es necesaria. En el
mismo sentido se expresó Miquel Rosselló (EU) mientras que Joan
Huguet (PP) consideró que no es ahora el momento.
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