La coalición Progressistes per les Illes Balears y el PSOE
coincidieron ayer en su estrategia de campaña y dedicaron parte de
su jornada a explicar sus propuestas en política fiscal. El
candidato socialista, Francesc Antich y otros integrantes de su
candidatura eligieron el mercado de S'Olivar y Nanda Ramón (de
Progressites) la delegación de Hacienda en Balears.
Ramón, junto a otros dos candidatos, explicaron mediante una
balanza, que Balears aporta mucho más dinero al Estado que lo que
luego recibe y abogó por la fórmula del concierto económico como
nueva fórmula de finaniación. Mediante este sistema, la Hacienda
autonómica recaudaría todos los impuestos y luego aportaría un
«cupo» al Estado. Este sistema es el que se utiliza en el País
Vasco y Navarra.
Ramon citó algunos datos recogidos en un informe elaborado en
2002 por la Fundación Nacional de Cajas de Ahorros (Funcas), que
puso de relieve que el Estado recauda anualmente 8.435 millones de
euros en el archipiélago, dijo. Según este estudio, la diferencia
entre lo que pagan los ciudadanos de la comunidad autónoma y lo que
reciben del Estado se eleva a 3.092 millones de euros, recalcó.
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