Protesta de un grupo de profesores antes de celebrarse unos exámenes de catalán.

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Todavía no hay una decisión en firme pero la Conselleria d'Educació del Govern balear está sopesando la función de la Junta Avaluadora del Català (JAC) y no descarta, incluso, su supresión. Así lo indicó ayer el conseller Francesc Fiol que precisó que este organismo, que se encarga de expediir los títulos oficiales de catalán, no tiene demasiada razón de ser, si bien insistió en que su supresión definitiva sería consecuencia de un análisis en profundidad que no figura en estos momentos como «prioridad».

Fiol recordó que en otras comunidades no existe un organismo similar y consideró que no hay ninguna razón para que la junta tenga la exclusividad de las pruebas ni de la expedición de títulos. La JAC es un organismo asesor del Govern. Lo que sí dejó claro es que, para solventar la actual situación de bloqueo, su departamento se está planteando contratar profesores y convocar las pruebas suspendidas de forma indefinida. Fiol apuntó que estos exámenes serían, en cualquier caso, «después del verano».

La suspensión de las pruebas de catalán, de las que ayer informaba Ultima Hora se convirtió en el asunto central de las declaraciones y comentarios de pasillos en el Parlament balear, que ayer celebraba sesión plenaria. No sólo opinó el conseller. También expusieron sus puntos de vista los responsables de los partidos de oposición. La suspensión de las pruebas de catalán es una secuela del aprobado general que hace unos meses concedieron los profesores de la JAC en disconformidad con la política educativa del Ejecutivo. Para Fiol, «es un chantaje sin precedentes».