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El senador del PSOE por Mallorca y ex presidente del Consell Polític de los socialistas de Palma, Joaquín Bellón, ha decidido entrar de lleno en la batalla congresual del partido y presentar su candidatura a la secretaría general de la Federación Socialista de Mallorca (FSM), que ahora controla el llamado sector nacionalista del partido que representa Francina Armengol. El propio Bellón -que junto a Ramón Torres controla buena parte del partido en Palma- confirmó ayer la noticia adelantada por Ultima Hora el pasado sábado y explicó que quiere forzar un pacto entre las familias socialistas. En su opinión, hay que conseguir una dirección donde todos los sectores socialistas estén representados y situar al PSIB «en la línea de Zapatero», que es la que se ha demostrado «válida» en las pasadas elecciones.

Bellón, que en las elecciones al Senado sacó unos diez mil votos al actual presidente de la FSM, Joan Mesquida, ha mantenido ya diversas reuniones con Francesc Antich, al que ha comunicado su decisión y al que también ha hecho saber que le apoyará en el congreso del PSIB si opta a la secretaría general. El voto de Palma es decisivo para cualquier acuerdo interno de cara a los congresos. Algunas fuentes señalan que, en realidad, Bellón tiene ya eplacet de Antich para «aislar» al otro candidato al puesto que ocupa Francina Armengol, el secretario de Organización Damià Cánoves.

Cánoves y Bellón tienen algo en común: los dos cuestionan el excesivo poder que atribuyen a Armengol y a sus seguidores, como Celestí Alomar o Cosme Bonet. Sin embargo, Bellón ve factible el acuerdo que pasaría por desmontar este poder, devolver el protagonismo a Palma y lograr un congreso regional (el del PSIB) pacífico y con una sola candidatura. Los socialistas de Palma están a la espera pero «tentados» por Damià Cánoves, que intenta un acuerdo de las agrupaciones periféricas, como Andrtatx, Calvià, Palma y Llucmajor. Armengol fue elegida la pasada semana portavoz socialista en el Parlament y en una entrevista concedida a este diario señaló que no optaría a la secretaria general del PSIB y que tampoco era su intención ser candidata en 2007. Bellón jugó un papel clave hace unos meses, cuando Antich decididó anular la estructura de los socialistas de Palma y descabezó la dirección que controlaba Antoni Roig.