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La FORTA, el organismo que agrupa a las televisiones autonómicas españolas, ha congelado la incorporación de IB3, el futuro canal balear. La FORTA ha comunicado a IB3 que no puede unirse formalmente al resto de canales autonómicos hasta que no tenga aprobado el presupuesto y las plantillas de la televisión, dos requisitos que no pudieron conseguirse en la última reunión del Consell Assessor de RTVE por la falta de los votos necesarios. En la última reunión no pudo ser aprobado el presupuesto porque hacían falta las dos terceras partes de los votos del consejo asesor. La directora general del ente público, María Umbert, espera que a finales de este mes vuelva a reunirse el Consell Assessor de RTVE para aprobar el presupuesto, los sueldos y las plantillas del ente público. En esta ocasión será suficiente la mayoría absoluta del Consell Assessor -órgano presidido por José Ramón Orta- para dar el visto bueno a las plantillas y al presupuesto, que superará los 22 millones de euros en su primer ejercicio. Una vez superado este trámite, Umbert volverá a pedir el ingreso en FORTA, el organismo que permitirá a IB3 tener acceso a los partidos de la Liga de Fútbol Profesional, a un amplio repertorio de películas y algunos programas especiales, entre otros productos. El ente público deberá pagar un canon anual a FORTA que se calculará en función de la población que podrá contemplar la futura televisión autonómica balear. Al margen de este canon anual, IB3 pagará a FORTA en función de los programas que decida comprar.

Mientras espera su incorporación a FORTA, el ente público podría publicitar esta misma semana la oferta pública de ideas y proyectos. Aunque todavía falte casi un año para empezar a emitir, Umbert es partidaria de que las productoras privadas comiencen a aportar ideas lo antes posible sobre programas para ser emitidos en IB3. De hecho, toda la programación del canal balear se comprará a las productoras privadas, incluidos los informativos. Para ello, el ente audiovisual marcará un catálogo de precios para la adquisición de programas a las productoras privadas. IB3 marcará un máximo de costes por programas para intentar evitar al máximo que la televisión autonómica balear pueda hipotecar en el futuro las arcas de la Comunitat Autònoma, un problema que han sufrido ya algunas comunidades autónomas. No obstante, IB3 exigirá unos niveles de calidad para evitar ofrecer «telebasura» a los teleespectadores de Balears.