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El jefe de operaciones de Médicos Sin Fronteras en Daguestán, república del Cáucaso ruso vecina con Chechenia, Arjan Erkel, fue liberado el pasado fin de semana después de permanecer secuestrado durante casi dos años. El técnico humanitario, que había sido retenido el 12 de agosto de 2002 por un grupo de desconocidos, fue puesto en libertad a primeras horas del domingo gracias a las incesantes presiones de Médicos sin Fronteras. Detrás de la labor ejercida por MSF se encuentra el intenso trabajo del mallorquín Pere Joan Pons, al frente del departamento de comunicación de la célula de crisis destinada a acabar con el secuestro.

Una operación conjunta del Ministerio daguestaní de Interior y del departamento para Daguestán de los Servicios Federales de Seguridad rusos (FSB) ha posibilitado, finalmente, la liberación del antropólogo holandés Erkel, según agencias. Desde la ciudad suiza de Ginebra Pons comentaba ayer: «Me siento extremadamente satisfecho por la liberación de Arjan. Pero quiero subrayar que este caso debe servir para focalizar la atención sobre la zona, actualmente en extrema precariedad, donde vive gente en condiciones realmente difíciles. La falta de seguridad en el Cáucaso dificulta la asistencia. Un secuestro como el de Arjan sólo bloquea e impide la cooperación en la zona. Afortunadamente todo se ha resuelto de forma óptima, pero en Médicos sin Fronteras se ha hecho un gran esfuerzo y se han destinado importantes recursos económicos para presionar a la comunidad internacional».

Pons, antiguo colaborador de Ultima Hora, viajó a Moscú para ejercer presión sobre el presidente Putin. «No decimos que el presidente ruso sea culpable, pero sabíamos que los servicios secretos rusos estaban al corriente de las pruebas de vida de Arjan. También sabemos que había agentes rusos en el momento del secuestro. ¿Por qué no lo han liberado hasta ahora?».