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El incremento de la población, ligado al fenómeno de la inmigración, ha supuesto un importante aumento en la demanda de apertura de nuevas oficinas de farmacia en las Islas, especialmente en Palma, las zonas costeras y la isla de Eivissa.

De las siete farmacias que están a punto de adjudicarse, dos están ubicadas en Mallorca, tres en Menorca y dos en Eivissa.

Así lo confirmó ayer la directora general de Farmàcia, Francisca Gili, acompañada del jefe del Servei d'Ordenació Farmacèutica, Andrés Maroto, quien explicó que la dirección general está a punto de adjudicar siete nuevas oficinas de farmacia y de autorizar otras ocho, que posteriormente saldrán a concurso.

«El objetivo de la Direcció General de Farmàcia es que los habitantes de las Islas reciban una atención farmacéutica óptima, adecuada a la rátio de población que fija la ley», comentó Gili y añadió que, desde que se aprobó la Ley 7/1998 «se exige que la zona en la que se va a ubicar una nueva farmacia cuente con una población mínima de 2.800 personas, cuando antes tenían que ser 4.000 habitantes».