Los dirigentes de UM Damià Nicolau y Francesc Buils se mostraron
ayer muy duros con el PSM, partido al que acusaron de «incoherencia
política» al aliarse con CiU para las próximas elecciones europeas,
después de haber pactado con ERC en los últimos comicios generales.
Denunciaron además el veto del PSM, que impidió que el partido que
lidera Maria Antònia Munar concurra a las elecciones generales en
esta misma coalición. Buils explicó que Maria Antònia Munar trató
de reunirse con Mateu Morro y Pere Sampol para acercar posiciones
pero ninguno de los dos dirigentes nacionalistas accedieron a
formalizar este encuentro.
Los responsables de UM ratificaron que concurrirán a las
próximas elecciones con Coalición Canaria, el Partido Andalucista,
el Partido Aragonés, Convergencia de Demócratas Navarros y
Extremadura Unida. El nombre del candidato de UM y el puesto que
ocupará en la lista se decidirá la próxima semana. También el PSM
convocó ayer a los medios de comunicación para explicar la decisión
del Consell Polític de concurrir a las elecciones con CiU. Mateu
Morro no quiso contestar a las acusaciones de veto por parte de los
nacionalistas de UM y se limitó a señalar que, con este acuerdo
permitirá al PSM llevar a Europa sus propuestas territoriales y
ambientales «que no son las que defiende UM».Por lo que respecta a
la decisión del Consell Polític de no pactar con ERC, Morro explicó
que el partido catalanista había exigido tener presencia en la
lista del PSM a las elecciones autonómicas de 2007 en puestos de
salida. «No hemos hecho ni considerar esta propuesta», señaló el
secretario general del PSM. Frente a esta propuesta condicionada,
el Consell Polític optó por aceptar la propuesta «más abierta» de
CiU.
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