TW
0

Ayer al mediodía llegó al aeropuerto de Son Sant Joan un avión que transportaba un cargamento muy especial, se trataba de un barco. El avión, un Antonov 124 de la compañía rusa Polet Airlines, con unas dimensiones de 69,1 metros de longitud, una envergadura de 73,3 metros y un peso de 392 toneladas, llegaba procedente de Orlando, y el barco que llevaba en su interior era una embarcación de recreo 615 Sun Sport, de 18,54 metros de eslora y 4,80 de manga y valorada en más de un millón de euros.

La embarcación ha sido construida en los astilleros de Sea Ray de Florida, en EEUU. Este tipo de aviones aterriza con cierta frecuencia en el aeropuerto de Palma, pero lo excepcional era el barco que llevaba en su interior. La empresa Marina Marbella Balear S.A. ha sido la encargada de organizar el transporte del barco, que ha tenido que ser en avión debido a un retraso con los permisos para que saliera hace dos semanas en el interior de un barco de carga; para evitar que el retraso en la entrega fuese excesivo y debido a que se trataba de un buen cliente, la empresa decidió optar por este método y correr ella con los cerca de 300.000 dólares que cuesta la operación.

El director general de Marina Marbella, Lars Sundberg, se desplazó a Palma para recibir el barco y declaró que «esta no es la primera vez que trasladamos un barco en avión, ya lo hicimos con uno desde España hasta Rusia; pero sí que es la primera vez que nosostros corremos con los gastos». La embarcación fue trasladada por dos camiones y una grúa de alto tonelaje hasta el Puerto de Palma, pero no se hizo por los accesos habituales, sino por la antigua carretera que rodea la base aérea de Son Sant Joan para acceder a la de Manacor y así llegar al puerto. En el puerto de Palma estaba previsto que se montaran el hard top, las hélices y otros accesorios, y seguidamente el barco Sun Sport fuese trasladado a la sede de Marina Marbella Balear S.A. en Porto Cristo, donde sería entregado al nuevo propietario.

Pablo Peral