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En tan sólo unas semanas, el mallorquín Raúl Sánchez se ha convertido de chófer en una empresa de menaje de hostelería a modelo internacional. A sus 22 años de edad y 1.81 de estatura, su rostro circula por toda Mallorca como presentación en el mundo publicitario a través de un flayer de La Demence, precisamente la discoteca y local de ambiente donde salió elegido mister La Demence 2004. Un concurso de belleza que no finaliza donde se acaba la gala, sino que su ganador, en este caso Raúl, comienza una nueva etapa profesional en el mundo de la moda, la publicidad y la promoción. Incluso podría protagonizar algunas de las páginas de la próxima edición de la revista «Zero».

Raúl, de cuerpo envidiable, tímido y actualmente sin novia, asegura que «hoy en día, para un chico es difícil ser fiel. Aunque yo cuando tengo pareja lo soy». El joven se presentó al certamen de Mister Baleares 2004 animado por sus amigas. Su madre, de pequeño, quería apuntarle a una agencia de modelos, pero Raúl siempre creyó que eso no era para él. «Ahora estoy supercontento -asegura-, me divierto mucho con lo que hago, pero tampoco dejo de lado mi trabajo de chófer en Salvid».

La agencia Cream Model Management, con Philip Schorlemer, es quien le «conducirá» los próximos meses por Italia, Francia y Alemania, lugares donde existe una demanda del prototipo de modelo que encarna Raúl. Desde los diez años de edad, Raúl ha practicado artes marciales como taekwondo, full contact y aikido, además de ejercitarse con pesas y hacer mucho ejercicio físico. Su mayor afición son los «tuning» y precisamente mañana viernes viaja hasta Barcelona, donde hay una concentración.

Julián Aguirre