TONI LIMONGI30/09/04 0:00
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La delegada diocesana de Ensenyament de Mallorca, Maria Dolors García-Carpintero, aseguró que los planes del Ejecutivo central sobre la asignatura de Religión significan una «devaluación» de esta materia y crea un «inquietud constante» entre los profesionales del sector. García-Carpintero subrayó que «en Mallorca un 60 por ciento de los alumnos de educación Primaria de las escuelas públicas eligen Religión, mientras que en Secundaria el porcentaje es de un 30 por ciento. El Ejecutivo quiere 'sacar' del horario escolar la asignatura de Religión y que no sea evaluable. No evaluar significa devaluar. Por otro lado, al proponer que no haya alternativas a la 'opción' de la Religión, se está marginando al estudiante que quiera estudiar Religión a hacer más horas».

Actualmente en Mallorca enseñan esta asignatura en la escuela pública un total de 102 maestros de Primaria (profesionales que han cursado magisterio más la especialidad de Religión) y 38 profesores de Secundaria (licenciados en Teología). «Con esta nueva reforma habrá mucha incertidumbre entre el profesorado, sometido continuamente a cambios y a la 'elección' del alumno», aseguró. García-Carpintero aseguró que «la educación religiosa tendría que estar al margen de la política. Necesitamos urgentemente un pacto escolar con el Ejecutivo para garantizar la educación religiosa al margen de quien gobierne, al margen de la política».

Añadió que «en Europa, excepto en Francia, la Religión está contemplada dentro del sistema educativo con normalidad. Además, el artículo 27.3 de la Constitución reconoce el derecho de los padres a elegir el tipo de educación que esté de acuerdo con sus convicciones». «Esta asignatura es esencial para la formación integral completa del alumno», consideró. La delegada diocesana también precisó que «proponemos una opción de elección libre, donde se aborde el hecho religioso desde todos los puntos de vista de las manifestaciones humanas. Que se pueda elegir estudiar el hecho religioso entre dos opciones: una confesional y otra no confesional».