La salida fue todo un espectáculo para el público, muy pendiente en todo momento de la evolución de la marcha. Foto: PERE BOTA

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La delegación balear del Club Nacional del Seat 1430, 124 y 124 sport sacó ayer de paseo sus reliquias, viejos coches pero con historia acumulada a costa de recorrer muchos kilómetros por carreteras de la Isla a lo largo de las décadas de los 60, 70 y 80. Entre ellas pudo verse a sus tres reinas de la corona, un Fiat 124 Abarth, un Seat 124/2000 y otro Seat 1430 primera serie.

Del primero sólo se construyeron 950 unidades en todo el mundo. El que está en Mallorca lo trajo Darder cuando llevaba el servicio Fiat. Sus puertas son de aluminio y el capó de fibra. Está valorado entre los 18.000 y 30.000 euros, siendo su parecido más próximo a éste que al primero, «aunque el precio está en lo que uno lo quiera vender -dice el dueño- y lo que te quieran dar». Según el propietario del Seat 124/2000, se fabricaron en España sólo 896 coches y a Balears sólo llegaron cuatro. «Éste es el único que queda, siempre que no salga otro por ahí». La Seat homologó uno de ellos para que participara en el Rally de Montecarlo, «quedando en tercera posición».

En cuanto al 1400 primera serie, éste en concreto de color azul, fue construido en 1969. Posiblemente sea el más antiguo de Mallorca. A la excursión se sumaron otros coches, algunos que nada tienen que ver con este «club», como el Seat 850, 600 y un R-10, «que nos han pedido participar y no nos hemos podido negar», según el presidente. El recorrido, con salida desde la explanada del estadio de Son Moix, discurrió por Calvià, Capdellà, Andratx y Estellencs, donde tuvo lugar el almuerzo, para desde allí, regresar a Palma.

Pedro Prieto