Torres Blasco15/12/04 0:00
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Un gran pacto sobre la Educación que sirva para fijar las líneas estratégicas del modelo balear y que aporte soluciones a un problema que afecta a todo el Estado pero que incide especialmente en Balears: los altos índices de fracaso escolar. Es el anuncio que hizo ayer el conseller d'Educació Francesc Fiol durante el pleno del Parlament. La Cámara balear celebró ayer una de esas sesiones en que se debaten cuestiones que afectan al día a día de la gente: se habló de educación y se habló también de los efectos que puede tener sobre el mercado laboral las propuestas de reconversión del sector turístico. En relación a la primera cuestión, el modelo educativo, todo se inició con una iniciativa del propio PP en la que se cuestionaba la suspensión de la LOCE. Aprovechando este debate, Fiol solicitó intervenir y abrió lo que se llama una «cuestión incidental», que es como se llama en la jerga parlamentaria a las intervenciones no previstas de miembros del Govern.

Fue entonces cuando «convocó» a todos los partidos y sectores implicados a un pacto con un Congreso sobre Educación a celebrar en la próxima primavera. «En muchos puntos podremos llegar a acuerdos para alcanzar un pacto educativo donde todos nos encontremos cómodos», explicó Fiol, que señaló que el objetivo del debate no es elaborar una nueva Ley de Calidad de la Enseñanza o impedir que se aplique la Ley estatal, «sino hacer posible el modelo que la mayoría de la sociedad balear quiera». «Espero que no sea una cortina de humo para tapar problemas concretos», advirtió Eduard Riudavets (PSM) quien, al igual que el socialista Andreu Bosch, expresó su temor a que el PP utilizara el Parlament balear para exhibir una mayoría contraria a las del Gobierno central. Y es que, en líneas generales, lo que hizo Joan Huguet (PP) fue defender la LOCE aprobada en la época del Gobierno de Aznar y culpar a la LOGSE socialista de la situación de la enseñanza y el alto indice de fracaso escolar.

Fiol apuntó a que ahora es menor la implicación de la familia con la educación y también apuntó que, en Balears (lo que explicaría en cierto modo el fracaso escolar) se abandonan antes los estudios para trabajar en el sector servicios, principalmente en turismo. Precisamente, esta cuestión (turismo y empleo) fue objeto de una interpelación anterior. La presentó la socialista Carme García Querol quien lamentó que el Govern estuviera hablando de reconversión del sector turístico sin tener en cuenta el impacto social que ello representa. Indicó que el «todo incluido» elimina puestos de trabajo y, con datos de los sindicatos y de la Mesa por el Empleo, recordó que hay 20.000 personas que trabajan sin contrato en el sector turístico.