Casi dos mil militantes del PP se dieron cita ayer en el Casino de
Mallorca para participar en la tradicional cena de Navidad que cada
año celebra la formación política. En la cena intervinieron el
alcalde de Calvià, Carlos Delgado, como anfitrión del acto, la
alcaldesa de Palma, Catalina Cirer, y el president del Govern,
Jaume Matas, quien pidió a los militantes que sigan demostrando el
mismo entusiasmo por el partido, pero que no bajen la guardia en
este momento dulce.
En esta ocasión no hubo karaokes, como el año pasado, pero si se
exhibió un vídeo casero promovido por Catalina Cirer, en el que
diferentes militantes y cargos del PP entonan el conocido
villancico «Fum, fum, fum», pero adaptado a la realidad
política.
La propia Cirer, los concejales del Ajuntament de Palma, los
consellers José María Rodríguez, Jaume Font y Joan Flaquer, el
president del Parlament, Pere Rotger, y diversos militantes
cantaron sobre la polémica de las carreteras, la llegada del metro
a la Universitat y otras cuestiones municipales que han marcado el
año 2004. La cena concluyó con la actuación de Agustín «El casta»,
que también puso la nota de humor en el casino.
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