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El comandante general de Balears, Luis Peláez-Campomanes Fernández, afirmó ayer en el Palau de l'Almudaina durante los actos de celebración de la Pascua Militar 2005, que «la situación internacional y la incertidumbre de ahora debe hacernos redoblar los esfuerzos para conjugar una eficaz lucha internacional contra esa lacra del terrorismo».

El general Peláez-Campomanes, asimismo, anunció que en el primer semestre del año «deberemos acometer las adaptaciones orgánicas, que serán mínimas en la Comandancia General, para adecuarnos a la nueva estructura de organización y funcionamiento del Ejército». En esa línea, confirmó que la principal repercusión, probablemente, será la dependencia del mando de Fuerzas Terrestres desde el 1 de julio.

Luis Peláez-Campomanes tuvo palabras de recuerdos para las víctimas del atentado terrorista del 11-M en Madrid, «que pone a prueba nuestro sistema de valores y las convicciones más profundas de nuestros conciudadanos, golpeando con fuerza los pilares mismos de la convivencia en paz, de la libertad y de la democracia», dijo.

También, expresó su solidaridad y apoyo a las naciones afectadas «para las víctimas del reciente maremoto». Previamente al discurso, el comandante general de Balears pasó revista a la compañía de honores del Ejército de Tierra. A continuación se procedió a la imposición de condecoraciones a militares y civiles, que fueron entregadas por el general Luis Peláez-Campomanes, por la vicepresidenta del Govern, Rosa Estaràs; el delegado del Gobierno en Balears, Ramón Socías; la alcaldesa de Palma, Catalina Cirer; el presidente del Parlament, Pere Rotger; la vicepresidenta del Consell, Dolça Mulet, y Antoni Terrassa, presidente del TSJB.