El presidente de s'Institut de Serveis Socials i Esportius de
Mallorca, Antoni Serra, recibió ayer a la delegación de alcaldes y
regidores de Alicante y Mallorca que el pasado mes de octubre
protagonizaron la firma de la «Carta de Pego», un documento que se
refiere a los antiguos vínculos lingüísticos, comerciales y
culturales entre isleños y valencianos. El documento se enmarca en
el programa «Terra de retrobament» y está impulsado por la Fundació
Cultural Baleària, 14 municipios de Alicante, 15 de Mallorca, amén
de s'Institut. A su amparo se ha organizado un programa de viaje
dirigido a la tercera edad en el participarán 3.600 jubilados.
El objetivo de «Terra de retrobament» es propiciar el
reencuentro de mallorquines y descendientes de los antepasados que
«repoblaron» el reino de Valencia tras la criba que ocasionó la
orden de expulsión de los moriscos de Felipe III en 1609. Una
importante migración que permitió a muchos escapar de la mala
situación económica y social de Mallorca y que supuso un importante
intercambio cultural.
«A pesar de los siglos transcurridos y de las visicitudes, la
memoria histórica en ambos lados de la mar se ha mantenido viva y
ha permitido conservar vestigios claros del patrimonio cultural
común», afirma la Carta. El programa tiene como objetivo fomentar
el conocimiento del patrimonio simbólico común; la comunicación de
los ciudadanos, instituciones y organizaciones valencianas y
baleares; acciones de cooperación entre ayuntamientos, entidades
culturales, cívicas o empresariales; y la promoción de ambos
territorios desde una vertiente cultural.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.