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Una proposición relativa a «la recuperación de la memoria histórica de todos aquellos que murieron por sus ideas y por la libertad», presentada conjuntamente por el PSOE y por EU-EV provocó los únicos momentos de tensión vividos en las diferentes comisiones celebradas ayer en Cort. La propuesta hacía una referencia explícita a las víctimas de la Guerra Civil y de la Posguerra y también pedía la eliminación «de todos los signos fascistas que aún perduran en el municipio».

El portavoz de EU-EV, Eberhard Grosske, afirmó que el equipo de gobierno, que preside la popular Catalina Cirer, «homenajea tanto a las víctimas como a los verdugos», y añadió que «aún existe una extrema derecha sociológica que vota al PP». El edil del PP Carlos Veramendi pidió que fuera retirada la propuesta «para no volver a abrir las viejas heridas de la Guerra Civil».

El PSOE y EU-EV también presentaron una propuesta para establecer, con carácter anual, un acto de homenaje al último alcalde republicano de Palma, Emili Darder. El portavoz del PSM, Pere Muñoz, propuso que todos los grupos consensúen cómo organizarlo.