El vicario general de la Diócesis de Mallorca, Andreu Genovart, a
petición de la Asociación de Cofradías de Palma, pronunció ayer el
solemne pregón de Semana Santa, ante un público que no llenó la
Basílica de Sant Francesc. En su intervención, Genovart invitó a
todos los palmesanos a vivir con autenticidad la Pascua.
«La mejor Semana Santa no está en Roma ni en Jerusalén, está al
lado de los que sufren», afirmó tras hacer una descripción «sin
crítica ni juicio» de la situación «convulsa» que vive nuestra
sociedad. El terrorismo, la inmigración, la violencia de género, la
pobreza y, al mismo tiempo, la solidaridad, la globalización, los
avances... fueron algunos de los aspectos en los que se detuvo el
vicario general a lo largo de su invitación.
Durante su pregón, Genovart se preguntó si «todavía se le puede
llamar santa» a esta celebración. El vicario hizo un recorrido por
la las distintas vivencias de unas fechas «que contienen los
misterios más importantes de la fe». Para muchos será «un encuentro
con las tradiciones de infancia, panades, confits,.... Para otros
la posibilidad de tomar unos días de vacaciones, otros volverán a
trabajar, abrirán los hoteles...», dijo mientras reivindicó la
necesidad de descubrir «intensamente el dolor y el amor de la
Semana Santa».
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